Más de un millón doscientas mil personas en las calles de Santiago de Chile pidiendo la dimisión del presidente Piñera...

Otro millón en las calles de Hong Kong contra la ley de Extradición a China...

Y, como no, cientos de miles de personas en Barcelona pidiendo la libertad de los condenados por la sentencia del procés...

Todos tienen algo en común: que son manifestantes en 2019. Manifestantes 3.0 con las nuevas tecnologías como punto de partida para todas sus acciones...

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Desde Hong Kong hasta Cataluña han llegado estrategias de boicot y camuflaje digital. La red de internet es ahora el canal más rápido para difundir mensajes, organizar las protestas y confundir a las autoridades.

La plataforma Tsunami Democrátic es la responsable en Barcelona y otras ciudades catalanas de coordinar el desafío a las fuerzas de seguridad... y hay estrategias diferentes según la red social o la plataforma online que usen. ¿De qué canales hablamos? Tanto los CDR como Tsunami utilizan las redes sociales clásicas que todos conocemos como Twitter, Facebook o Instagram... pero en lugar de Whatsapp la aplicación elegida para la mensajería instantánea es rusa y se llama Telegram. En Telegram puedes crear canales de difusión con cientos de miles de personas y los mensajes están cifrados, encriptados... lo que les hace prácticamente invisibles para los rastreadores digitales de la Policía o la Guardia Civil. Además puedes registrarte en Telegram sin teléfono móvil y buscar a contactos por el nick, su mote digital. Queda al margen de los números de teléfono todo lo contrario que Whatsapp que va ligado a tu número. Por Telegram se comunican en directo para avisar de controles policiales, cargas de los Mossos... la situación en la calle. 115.000 personas estaban suscritas a este canal durante la jornada de las protestas más violentas hace dos semanas, en la sexta jornada de disturbios en Barcelona.

Volviendo a las clásicas, la red que más viraliza mensajes por ejemplo para rodear el aeropuerto de El Prat es Twitter. Instagram viraliza infinitamente menos los contenidos y en Facebook la huella digital es tan grande que los instigadores huyen de ella. Pero el gran avance tecnológico lo ha traído Tsunami Democrátic... quitándole a los CDR el monopolio de la organización de la violencia callejera. Han creado una aplicación móvil propia, única...

La app independentista de Tsunami Democrátic cost, según la Policía, 300mil euros. Dijo que hay gente de traje y corbata que paga la fiesta y dirige la estrategia. Preparan golpes para la jornada de reflexión el 9 de noviembre y el Barça-Real Madrid del 18 de diciembre. Funciona con códigos QR y solo puedes acceder a la red si te admite y abre la puerta una persona que ya es miembro y del entorno de confianza de la organización. Tienes que estar físicamente cerca de esa persona que te muestra su código QR para que lo escanees con tu teléfono y así ganarte el acceso. Lo sabe TODO sobre ti: accede a tu cámara, tu micrófono, tus archivos guardados en el dispositivo... sabe donde estás y durante cuánto tiempo.

Esta es la parte digital de la violencia callejera. El Gobierno y las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado están al tanto de todo y por eso el Consejo de Ministros ha aprobado esta semana un decreto de seguridad digital para frenar este brazo digital (podríamos llamarlo así) del independentismo. Este decreto ataca algunas de las lagunas legales según el Gobierno existen en cuanto a organización de delitos callejeros en internet. El decreto servirá para que el Estado garantice la seguridad digital y obliga a todos los servidores de internet que utilicen las distintas administraciones en España (también la Generalitat) estén localizados dentro de la Unión Europea y no en paraísos digitales.

En 'La Mañana del Fin de Semana' hemos hablado con el Dr. Javier Plaza. Es Catedrático de Derecho Civil de la Universidad de Valencia. Ha reconocido que sí hay “vacíos legales” y que aunque se ha anunciado el decreto ley, tendrá “un contenido rectivo”. Que ellos (los CDR y Tsunami) “van por delante” y nosotros (los legisladores) “vamos por detrás”. El derecho debería plantearse la posibilidad de “adelantarse” teniendo una medida normativa preventiva “de mayor calado”. Si sabemos que estas conductas van a ocurrir, explica Plaza, que “lo lógico sería tenerlo previsto y tener una respuesta preparada”. Piensa que esta situación es como si “alguien tiene la pierna gangrenada” y en vez de “colocar un torniquete” se usa “una tirita”.

Además de movilizar y organizar disturbios, en Hong Kong por ejemplo los manifestantes han utilizado inhibidores de señales RFID, esas señales las encontramos en tarjetas de transportes... pasaportes... y almacena información sobre dónde hemos estado. Se ha usado el juego Pokémon GO como excusa para reunirse tanto en Hong Kong como en China. Así si viene la Policía les muestran el teléfono y dicen que están en un gimnasio Pokémon entrenando a sus Pokémon... Hay conductores de UBER que desactivan su GPS para llevar a los manifestantes de vuelta a casa. También Air Drop, el conocido método para compartir archivos entre dispositivos Apple. No necesita red móvil ni conexión a internet... solo bluetooth. Los punteros láser han llegado desde Hong Kong a Cataluña, utilizados para apuntar a los policías a los que toca lanzar adoquines o buscan cegarlos momentáneamente