La pandemia ha hecho que pasemos mucho más tiempo en casa y eso ha provocado que mucha gente, el que se lo puede permitir, se haya decidido a hacer obras y reformas en casa para adaptarla a las nuevas necesidades. Hay quien por ejemplo teletrabaja y necesita sacar un hueco para poner su mesa y su ordenador o el que ha visto que su casa no es tan funcional como pensaba.

El caso es que las empresas de reformas han visto como se ha multiplicado su trabajo en los últimos meses. Pero de la misma manera que ha saubido la luz o el combustible, también ha subido el precio de la materia prima para llevar a cabo este tipo de obras.

Según datos de la Confederación Nacional de la Construcción, principal patronal del sector, una de cada cuatro empresas constructoras ha tenido que parar o retrasar alguna de sus obras porque o bien no tienen el material que necesitan por la tardanza en los envíos o porque el alto precio de la materia prima hace inviable sacar adelante una obra.

Y que una obra se retrase o incluso se cancele, supone un gran destrozo económico.

Hay empresas que de momento están asumiendoesa subida de los precios como nos cuenta Ángel Pinilla, arquitecto y constructor madrileño "aunque vean reducidos los márgenes de beneficio"

Pero además de esa subida de precios, otro de los principales problemas que afronta el sector es el desabastecimiento de materia prima, especialmente por el boom de la exportación de materiales a China donde la demanda ha aumentado muchísimo y pagan además más.

Aquí, en España, también ha aumetnado la demanda, tienen más encargos que antes, pero menos materiales menos materia prima que, o no llega, o no lo hace a tiempo. Retrasos que, en algunos casos, llegan a los tres meses de espera, lo que dificulta mucho completar las obras dentro de los plazos previstos.

Y si vamos a los materiales, ¿cuáles han subido más? Por ejemplo, la madera. En febrero empezó a subir, pero a un ritmo muy lento. Y ya a partir de mayo, semana a semana, el precio se incrementaba un 15-20%. Ahora mismo supera el 120% de aumento. ¿Por qué pasa esto? María Rubinos es copropietaria de una empresa maderera en Monforte de Lemos y nos señalaba que la clave está en la falta de competitividad en los precios. "Llegan menos productos porque en otros sitios pagan más por ellos", nos cuenta María.

Y claro, para poder seguir con el negocio no le queda otra que repercutir ese incremento en el precio final. En lo que pagamos tu y yo por la madera. Algo que le ha costado mucho hacer.

Este incremento de precios por falta de stock nos señala María que llega en un momento muy malo. Un jarro de agua fría justo cuando se estaban recuperando

En un pequeño pueblo de Teruel, a Alcorisa, también notan este incremento de precios. Desde hace más de 100 años, la familia Celez con su fabrica "Alcomobi" muebles para todo el mundo y, en los últimos meses "estamos viendo como nuestros almacenes se quedan vacíos", tal y como nos cuenta Santiago, propietario de esta compañía