Es imposible limpiar toda la casa a fondo cada semana. Sin embargo, estas zonas de difícil acceso son las favoritas de los arácnidos para tejer sus famosas telarañas. Seguro que si tienes un salón de techos altos o con vigas vistas, hay algún hueco ocupado por una de ellas. Se forman a partir de la seda que las arañas biosintetizan y secretan a través de sus glándulas de hilado, en la parte posterior del abdomen. La buena noticia es que quitarlas es de lo más sencillo y apenas lleva tiempo. Otra cosa es prevenir su aparición.

Ahora bien, las arañas más evolucionadas tienen hasta siete glándulas diferentes con las que pueden sintetizar diferentes sedas. Por ello, hay diferentes tipos de telaraña. Incluso algunas son más fuertes que el acero del mismo grosor, por ello, son objeto de investigación. En España no te encontrarás una de estas, salvo que una especie extraña se escape. Estas tienen algunas funciones en la naturaleza, como la caza. Es por lo que hay personas a las que no les estorban, ya que puede servir para eliminar insectos del hogar.

En cualquier caso, hay que controlar la presencia de las arañas en el hogar. Si bien algunas son beneficiosas porque eliminan algunos mosquitos, otras son muy perjudiciales, puesto que segregan veneno que pueden llegar a dañar tanto a las personas como a los animales que tienen cerca. Para evitar que entren, uno de los remedios habituales son los burletes, aislantes de diferentes componentes: silicona, de espuma, de caucho, de cepillo, con flecos... También hay que poner un ojo en las cañerías, pero lo más importante es mantener la casa limpia.

Quitar telarañas

Si ya han entrado y ves una tela de este animal, hay fórmulas para que tu aracnofobia no suponga un problema. Para darle carpetazo a las telarañas dentro de casa, un buen recurso es eliminarlas con el tubo de aspirador más largo que tengas o un aspirador sin cables. De esta forma puedes acceder a los techos y las paredes altas, el lugar más habitual donde se encuentran. Si donde quieres eliminarlas es en el exterior, lo más efectivo es que utilices una manguera y eches agua sobre la seda.

Volviendo dentro del hogar, otro consejo es que envuelvas un paño húmedo en el cepillo de la escoba o la fregona. De esta manera, quitar la telaraña será coser y cantar gracias a la humedad. La idea es que queden impregnadas sobre el elemento de limpieza. Por ello, otra opción es coger un palo largo y coloca cinta adhesiva en uno de los extremos, de forma que estas también quedarán pegadas.

Para prevenirlas, hay varias cuestiones que tener en cuenta. Las arañas sienten preferencia por determinados lugares de nuestros hogares. Las zonas con mucha luz, las esquinas y los recovecos, los rincones llenos de polvo y las áreas más desordenadas son sus favoritos. Por ello, debemos prestar atención sobre esas ubicaciones. Por ejemplo, si utilizamos algo con olor a menta o cítrico, no se acercarán. Lo mismo sucede con un producto más inusual: la laca del pelo.